martes, 22 de agosto de 2006

Algunos Metros Cuadrados y un biombo


Hace poco me di cuenta de que cada día estoy un poco más obsesionado con mi piso. O sea, cuando digo piso, quiero decir estudio. No estoy seguro de cuantos metros cuadrados tiene- aunque más que cuadrados yo diría metros triangulares porque no caben muchos cuadros en él- pero desde hace un tiempo estoy obsesionado con cambiar todo de sitio para que parezca más grande.

Sé que es una tontería pues el piso será igual de pequeño o de grande ponga la cama y el sofá donde los ponga. Y, sin embargo, ahí sigo. Este pasado domingo dediqué unas horas de mi descanso a visitar el Rastro aquí en Madrid. No encontraba nada que me llamara la atención hasta que di con un biombo. En una de mis fantasías decorativas un biombo me divide el espacio- o mejor, como dicen en Argentina, el único ambiente- en dos zonas claramente delineadas. Como si de alguna manera, un biombo pudiera hacer las veces de un tabique. Pues el caso es que este biombo me gustaba bastante. De un lado tenía una replica en blanco y negro del mapa de Madrid tan famoso del siglo XVII o XVIII que se ve por todas partes. Y del otro, al ser parte de un libro, las hojas del mismo con algún que otro escudo.

La verdad es que me gustó bastante. El marchante quería 300.oo euros por él. De alguna manera logré que lo rebajara a 100.oo euros. Aún así, no lo compré. Me parecía mucho dinero, lo cual es ridículo pues los otros biombos ya fichados por mí en el Corte Inglés valen más- claro, son distintos, son medio hindúes- pero algo en mi me hizo titubear en el último momento y lo dejé. Claro, puedo ir mañana por él y ahí estará pero no sé qué hacer- si ir o no ir.

Esta obsesión por el piso creo que se debe al reducido espacio que tengo para vivir. No puedo presumir de haber vivido en casas de grandes extensiones, al menos no en Europa. En EEUU y México si lo hice, y quizá de ahí me viene la leve claustrofobia de mi maravilloso piso en Madrid-y digo maravilloso porque de verdad pienso que lo es. Está muy bien situado, súper céntrico, y tiene su encanto. Pero, claro, el fin de semana pasado, fui a una fiesta en un estudio más grande que el mío y....claro....culo veo culo quiero. Es una cuestión de metraje y de ambientes. Sé que necesito más de un ambiente en los que desempeñar las tareas de la vida en casa. No me gusta que cuando abro la puerta veo la cama, ni que al despertarme veo la puerta de la calle. Ni que desde el sofá veo la tele en diagonal porque de frente no cabe.

Claro, sé que estas quejas son muy burguesas y que hay personas que quisieran la mitad del espacio que tengo para poder vivir. No lo olvido. Es más, yo soy una de esas personas. Desde que salí de EEUU he vivido en muchísimos sitios. De 1988 a 1990, en España viví en 3 sitios distintos en un año y medio. De 1990 a 2005, en Londres, viví en 9 pisos distintos. Desde enero 2006, aquí en Madrid, ya he vivido en 2 sitios distintos. Y apenas estamos en Agosto.

Y es que siempre he vivido en muchos sitios, quizá por eso estoy obsesionado con mi piso actual. Porque lo veo pequeño, y lo quiero cambiar y hacer más grande. Y no hay manera. Y me obsesiono. Y por si fuera poco, espero poder vivir aquí mucho mucho tiempo, y quizá esa sea la fuente de tanta obsesión. Espero poder cambiar de obsesión dentro de poco. El verano se acaba, no puedo empezar la temporada de otoño con las obsesiones de verano...sería muy demodé....

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