martes, 22 de abril de 2008

Secuestro en alta mar

AOG, Madrid

Ayer tuve la suerte de ir a cubrir dos ruedas de prensa. Era el mismo día que había saltado la noticia del secuestro del atunero español 'Playa de Bakio' en aguas internacionales cerca de la costa de Somalía.

En la primera rueda de prensa, la vicepresidenta del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, esperó hasta el final de un acto que conmemoraba la labor de la mujer en el campo y su consecuente libro para decir lo que toda, o al menos la inmensa mayoría de la prensa ahí reunida, quería oir y lo que el país necesitaba escuchar: qué está haciendo el Gobierno de España para lograr la liberación de los marineros secuestrados por piratas.

Me sorprendió mucho que el Gobierno tilde de máxima importancia la presentación de un libro antes que la seguridad de 13 marineros españoles.

Por si fuera poco, no muy lejos del Círculo de Bellas Artes donde tuvo lugar la presentación biblio-campestre, había otra presentación: la del libro del ex ministro de Defensa del Gobierno Gonzalez, Narcís Serra.

Sabíamos que la nueva ministra de Defensa, Carme Chacón, estaría presente en el evento. Toda la prensa estaba reunida. Al poco de llegar ella y los demás asistentes, un enviado de su oficina de prensa nos informó tajantemente que "no va a hablar de nada". Es decir, hay 13 españoles secustrados en alta mar; el Gobierno ha decidido mandar la fragata de combate más moderna de la Armada, la Méndez Núñez, al océano Índico, el gobierno, según nos acababa de informar la vicepresidencia, está buscando ayuda y apoyo de parte de Francia, Reino Unido, la Unión Europea y la Unión Africana. Pero la señora ministra no hablará.

Y no habló del tema. De hecho, se quedó aproximadamente 40 minutos y se fue junto con el ex presidente del Gobierno, el señor Felipe Gonzalez, en lo que fue un macabro revoloteo de prensa, televisión, periodistas y fotógrafos que buscaban alguna declaración. Que querían informar al país de que el Gobierno se preocupaba por el paradero de estas personas.

Pero no ocurrió.

De momento, no he visto que el señor Zapatero salga en televisión defendiendo públicamente la postura y acciones del Gobierno, y acallando críticas, o al menos, apaciguando nervios y ansiedades por parte de las familias y demás de los secuestrados.

Sería injusto, e incorrecto, decir que el Gobierno no está haciendo mucho. Lo están haciendo seguro. Pero por alguna razón, se desvela aquí y allá una cierta despreocupación por el tema. Como que importa, pero no mucho. Nos importa claro, pero es que estamos con tantas cosas ahora mismo....

¿Acaso el Gobierno de España no entiende que necesita hablar más de asuntos como este? ¿Que las relaciones públicas son tan importantes como los privadas? ¡Quizá más!

¿Creen los secuestrados que su gobierno está haciendo todo lo que puede por ellos? Seguro que sí, pero...entonces, ¿por qué estos silencios y retrasos? ¿Por que no anunciarlo a los cuatro vientos?

No entiendo. Lo siento. Tienen mi apoyo pero no los entiendo.

Por desgracia, Spain has to be different. Todavía.

Mareando la PPerdíz

AOG, Madrid

Parece ser que desde que el PP volvió a perder las elecciones generales, algo pasa que nadie quiere que pase y que debería de pasar.

EL señor Rajoy, contra viento y marea, y sin darse por aludido, ha decidido aferrarse al poder a veinte uñas. Algunas voces, pocas, han empezado a decir que al partido le vendría bien otro líder. Aún no se sabe quien, pero parece ser que el liderazgo rajoyano no está tan libre de competidores como a él le gustaría.

El primer contrincante, al cual la cúpula genovesa ha emasculado desde hace unos días, proviene de la comunidad de Madrid. A saber, su flamante presidenta: Esperanza Aguirre.

Desde hace unos días, el PP no ha hecho más que descalificar a la posible candidata y hasta se ha sugerido que se fuese del partido.

Y yo me pregunto...

¿Cómo es que ese partido nos quiere vender una imagen de democracia y, a la vez, es incapaz de, democraticamente, renovarse?

El que se pregunte por qué el PP no ganó las últimas elecciones, que busque estos días una de las razones que mejor explican su derrota.

A la larga, quizá lo mejor para España es que este partido siga con el señor Rajoy a la cabeza. O que, mejor aún, capte a la señora Aguirre como lideresa. En cualquier caso, es bastante improbable que con cualquiera de los dos alcanzen la victoria en el 2012.

Y a pesar de esto, me niego a pensar que estas dos personas representan lo mejor que hay en ese partido. Algo en mí me dice que, de verdad, contra todos los pronósticos, en ese partido hay gente válida que bien le podrían ofrecer al país algo parecido a un partido serio y competente.

Ocurre que me niego a pensar que estas dos personas se encuentren entre las más válidas del Partido Popular.

¿O será que me equivoco?